Ya sea una caja de campana, una caja de ranura o una caja de una sola pieza, a menudo resulta difícil encontrar la caja adecuada para su producto. MPO le ofrece algunas ideas al respecto.
Breve descripción de los distintos modelos existentes, sus ventajas e inconvenientes.
El cuenco único
Este modelo consta de un fondo de caja y una tapa en una sola pieza. Sencillo, práctico y sólido, el depósito único garantiza tanto un cierre fácil como un transporte seguro gracias a su fondo y tapa combinados.
Así, es habitual encontrarlo en la creación de cajas y conjuntos de descubrimiento.


La caja del timbre
Este tipo de maletín, bastante clásico, consta de una base y una tapa que pueden encajarse entre sí.
Sencilla y elegante, la caja cloche puede declinarse en varias formas (cuadrada, rectangular...) y personalizarse sin límites. Su flexibilidad permite utilizarla en todo tipo de mercados.
La caja del cajón
La caja cajón: se trata de una caja compuesta por una caja rígida simple y un cajón.
A la vez sobria y elegante, la cajonera permite una apertura práctica a la vez que sublima los productos.


La caja con bisagras
A diferencia de la caja cloche, en la que el fondo y la tapa son dos elementos separados, la caja abatible tiene estos dos elementos unidos por un sistema metálico.
Esto permite abrir y cerrar la caja. Sinónimo de prestigio, este tipo de caja es característico de los productos de gama alta o de lujo.
Es habitual en el sector de los vinos y licores porque permite transportar los productos de forma adecuada y segura, al tiempo que mejora su presentación.
La caja de solapas
Este tipo de maletín tiene un fondo y una tapa con solapa que están unidos. Una vez plegada la tapa, la funda puede mantenerse cerrada y seguir teniendo un aspecto elegante mediante imanes o cintas.
La caja con solapa se distingue de otros modelos por el sonido característico de su cierre, que garantiza una buena sujeción al tiempo que confiere un aspecto de alta gama.


La caja faríngea
Similar a la caja de campana, la caja acanalada tiene un fondo y una tapa que se mantienen en su sitio gracias a una ranura cuando está cerrada.
El tamaño, el color y el efecto aplicado a la garganta dependen de la estética deseada.
Elegante y sofisticado, este tipo de caja suele preferirse para productos de alto valor añadido o pertenecientes a los sectores de lujo, como joyería, cosmética o perfumería.
Similar a la caja de campana, la caja acanalada tiene un fondo y una tapa que se mantienen en su sitio gracias a una ranura cuando está cerrada.
El tamaño, el color y el efecto aplicado a la garganta dependen de la estética deseada.
Elegante y sofisticado, este tipo de caja suele preferirse para productos de alto valor añadido o pertenecientes a los sectores de lujo, como joyería, cosmética o perfumería.